Bismillahir Rahmanir Rahim
Sobre el matrimonio
Hay una historia de Hz. Fatimah (ra) y Hz. ‘Ali (ra), donde Hz. ‘Ali (ra) le preguntó a Rasulullah (saws) cómo llevarse bien con Hz. Fatimah (ra) y Hz. Muhammad le dijo que se convierta en su esclavo. La versión correcta de esta historia es que, si el esposo se convierte en un esclavo de su esposa, ésta se convertirá en una servidora de su marido.
Sobre el Surah Al-A’raf
El verdadero significado de esta palabra, Al- A’raf, no tiene nada que ver con esta Surah. Entre el Paraíso y el infierno estamos esperando en un ámbito de incertidumbre. Es un estado en el que sin importar cuánto bien hayas hecho estamos inseguros de cuál será la decisión final. No sabemos si iremos en una dirección o en la otra, y esa ansiedad se representa con la palabra ‘Araf. Incluso si tuvieras que esperar minutos sería como si fueran años. Eso es lo que significa la palabra ‘Araf.
Sobre los Salawats
Cuando uno saluda al Profeta (saws) Allah (swt) le envía los salawats y es como si estuviera vivo para nosotros. Esto es simbólico. La palabra nafs se interpreta como la presencia y la sientes como si él estuviera vivo y saludándolo. Eso es lo que significa que el alma de él vuelve, tú tienes una conexión con él.
Sobre el Día del Juicio Final
La pregunta sobre el Día del Juicio Final acerca de que Allah va a destruir Su Creación es incorrecta. No hay nada parecido a eso. No hay destrucción. Nuestra mente, nuestra inteligencia, fue creada pero es limitada, y es imposible comprender cómo obra nuestro Creador. Quien pretenda hacer eso terminará en un hospital psiquiátrico. Todas las cosas que nosotros sabemos son definiciones. El conocimiento es una bendición para nosotros y hay cosas que no se nos ha permitido saber y eso también es una bendición para nosotros. En el ayat dice que te preguntan sobre el alma. El alma está bajo el control del Creador y no mucha información nos ha sido dada. Eso es lo que Allahu Ta’ala decidió. El Profeta (saws) nos dice que no tratemos de entender Su Esencia sino de enfocarnos en Sus Manifestaciones. Hay cinco ciencias y éstas se relacionan con Su Divinidad, que ni siquiera se las dio a Rasulullah (saws).
Tenemos que aprender a aceptar nuestras limitaciones. Un día, Hz. Abu Bakr (ra) le dijo a Rasulullah (saws): “Te amo tanto que no importa cuánto te alabe pues nunca estoy satisfecho. No soy capaz de alabarte lo suficiente. Rasulullah (saws) le dijo: “Decir: ‘¿qué puedo hacer? es suficiente para mí’”. En el momento en que tú no eres capaz de razonar estás llegando a tu nivel máximo de capacidad de entendimiento.
Sobre Avanzar en el Camino
Rasulullah (saws) dijo: “Van a morir y van a resucitar de la manera en que vivieron.” Es decir, que la vida después de la muerte será un ejemplo de cómo han vivido en este mundo, de la forma en cómo usaron su tiempo. La vida que uno ha tenido en el Purgatorio se verá en el Día del Juicio Final. Si has vivido como un ser humano, la vida en el Purgatorio será buena. Aunque la vida en el Purgatorio sea buena y agradable, igualmente la decisión en el Día del Juicio Final ni siquiera Rasulullah (saws) la sabe.
¿Cómo podemos entender si estamos avanzando en este Camino? Habrá situaciones y casos en donde tendrás que tomar decisiones. Si tomas decisiones que son en beneficio para los demás mayor aún que en beneficio propio, si consideras más a la misma Creación que a tu propia vida, entonces es un indicio de que estás avanzando.
Esta historia que les contaré realmente sucedió.
Había un hombre a quien toda la gente amaba. Esta historia me la contó el Mufti de Ankara. Cuando este hombre durante dos semanas seguidas no fue al Yumu’ah todos se empezaron a preocupar. Entonces después del tercer Yumu’ah que pasó decidieron ir a verlo a su casa y su hijo los hizo pasar. Estaba en su cama inmóvil. Estaba a punto de morir. Así es que decidieron rezar por él. A mitad del mismo, el hombre que estaba tendido en la cama inmóvil, comenzó a moverse, se sentó en la cama, y dijo: “¡Por qué te tomaste la molestia Rasulullah de venir a buscarme!”
El décimo Sheikh del Asitane, Abdurrahman Efendi, se fue de este mundo cuando cumplió ciento once años. Le gustaba tanto hacer dhikr que todos los días se iba a otra Tekke para seguir haciéndolo. Y un sábado en el Asitane, cuando estaba dirigiendo el dhikr, estaban haciendo una forma del mismo como hicimos cuando estábamos en el segundo piso, y en ese momento cuando hacemos: “¡Hayy, Hayy, Hayy!” se demoró más tiempo de lo normal. El Sheikh no paró, continuó diciendo: “¡Ya Hayy, Ya Hayy, Ya Hayy!” y continúa hasta el momento en que dice: “¡Illa Allah!”. Allí el dhikr se detuvo y el Sheikh que estaba en el medio se desplomó muerto. Vivió su vida diciendo: “¡Hayy, Hayy, Hayy”. Así que uno muere de la forma en que vivió. Este es un típico ejemplo de los que dijo Rasulullah (saws) : “Uno morirá de la forma en que vivió.”
Charla de Tugrul Efendi – Buenos Aires, Julio 2019
