La Noche de la Absolución

 

 

Bismillahir Rahmanir Rahim

 

Esta es una muy hermosa y especial noche. Y quería hablar, no solamente de la importancia de esta noche, sino de este mes, el mes de Sha’ban y el motivo por el cual lo celebramos.

Hay, sin embargo, discordia respecto a la importancia que le daba el Profeta (saws) y que tiene para todos nosotros.

A título de información los turcos llaman Berat Kandili a esta noche. Y encontré interesante esa palabra, “kandil”, que los turcos usan tanto y que se comenzó a usar en la época del hijo de Suleyman “El magnífico”, quien fuera un derviche y profundamente religioso. Él decretó que, en las cinco noches sagradas de nuestra religión, en todas las mezquitas se encendieran velas. Recordarán ustedes que antes de que llegara la electricidad había una posición, dentro de las mezquitas, que tenía la persona encargada de las lámparas de aceite que colgaban de esos aros gigantescos, que a su vez estaban sujetas a la cúpula a través de cables o sogas. Y la tarea de esta persona era muy importante ante el problema de tener que rezar a oscuras. Recuerden que más de la mitad de los salats se realizan en horas de la noche, como ser el Salat Al-Magrib, cuando comienza la noche, Salat Al-Isha’, Salat At-Tahayyud, para aquellos que lo practican, y Salat Al-Fayr, antes de que salga el sol.

De esas cinco noches, las lámparas, las velas, quedaban encendidas toda la noche. Para aquellos que querían dedicar esas veladas al Creador, podían quedarse en las mezquitas.

Hay, repito, bastantes diferencias entre los eruditos acerca de la validez de los hadices que hablan de estas noches. Algunos dicen que son hadices débiles, otros que no lo son, como siempre ocurre en todas las religiones. Estos son debates saludables, ya que nos mantienen interesados y con la necesidad de aprender.

Dicen que esta noche las puertas de la misericordia y del perdón se abren de par en par. Ya se han abierto a la hora del Salat Al-Magrib en la hora indicada en los lugares donde cada uno lo recibe, y permanecen abiertas hasta que sale el sol, e Insha’Allah, es una de las noches en la cual todos los rezos son aceptados.

La noche del trece, el arcángel Gabriel (as) llegó y despertó al Profeta (saws), y le dijo: “Despiértate que es la hora del Tahayyud.”

Para realizar el Salat At-Tahayyud, dicen, y nuevamente en cuanto a esto hay diferentes opiniones, pero nosotros nos aferramos a las más verídicas que dicen que uno debe tener un par de horas de sueño profundo y luego despertarse para hacer el Salat At-Tahayyud. La mejor hora para este tipo de adoraciones nafile, es la tercera parte de la noche, es decir, durante la cual también se realiza el Salat Al-Fayr.

Y cuando Hz. Muhammad (saws) se levantó a hacer el Salat At-Tahayyud, luego de que lo despertara el arcángel Gabriel (as), la tercera parte de todos nuestros pecados, de todas las cosas que hacemos y son incorrectas, fueron perdonadas por Allahu Ta’ala en esa primera noche. Lo mismo ocurrió la noche del catorce. En esa segunda noche otra tercera parte de los pecados fue perdonada. Y la última, el quince, Hz. Muhammad (saws) rezó y pidió por su nación, no sólo por la gente que lo rodeaba, por la gente que él amaba. Recuerden que él fue enviado como la Misericordia del Creador para Su Creación.

Nosotros no podemos hacer lo que hizo Hz. Muhammad (saws), ni nuestros rezos serán aceptados de la misma manera y con la misma intensidad que los de él. El Profeta (saws) nunca dijo hagan lo que yo hago, sino: “Imiten, hagan lo que me ven a mí hacer”, pero no como él lo hacía, solamente como una imitación, y eso lo dejó muy claro.

Tenemos la bendición de que esta noche coincide con la noche en que estamos juntos, la noche en que los Yerrahis celebran la ceremonia del dhikr. Los shiítas en esta noche, y estoy seguro de que aquellos que saben algo de esa tradición, recordarán que celebran el nacimiento del último Imam, Muhammad Al-Mahdi, que según ellos creen que regresará en el Final de los Tiempos.

Hablamos de todo esto, y hablamos de Sha’ban como el mes de Rasulullah (saws). Y esto lo leeré. El autor es Ibn Kathir, es una colección de libros, y habla de las cosas que han pasado desde el comienzo de la humanidad. En este capítulo, en este libro, habla de las cuatro Escrituras, los cuatro libros sagrados. Nombra la cadena de transmisión de esta información. Aquí dice que la Torah fue revelada a Hz. Musa (as) la sexta noche del mes de Ramadán. Los Salmos le fueron revelados a Hz. Daud (as) la noche doce de Ramadán. Hay que tener en cuenta que eso ocurrió cuatrocientos ochenta y dos años después, pero sucedió en Ramadán. El Evangelio, que le fue revelado a Hz. ‘Isa, Jesús (as), tuvo lugar la noche décimo octava del mes de Ramadán. Lo recibió cuando él tenía treinta años, y vivió bajo las órdenes de esas escrituras por tres años más. Ustedes saben que a la edad de treinta y tres años Allah (swt) se lo llevó hacia Él. Y también saben que el Sagrado Corán fue revelado en el mes de Ramadán. Así que tenemos los cuatro libros principales de las religiones monoteístas que fueron revelados, descendieron en ese mes, pero la distancia entre la revelación de la Torah y la del Evangelio fueron de mil cincuenta años, así que Jesús (as) recibe el Evangelio mil cincuenta años después. Y seiscientos años más o menos, posteriormente, desciende el Sagrado Corán, el último de los libros, la suma de todos los demás. Fue recibido por el último de los Profetas y así ha de ser hasta el Final de los Tiempos.

Esto lo quiero leer porque habla de Hz. Muhammad (saws) y no quiero cambiar absolutamente nada. Esto viene de Hz. Juraida (ra). Allah Todopoderoso habla y le revela a Hz. ‘Isa (as): “Sé diligente en enseñar y practicar Mi religión. Nunca te canses de hacerlo. Escucha y obedece.” Allah (swt) le dice eso a Su Profeta, y continúa: “Oh hijo de una mujer pura, la casta, la virgen. Tú has nacido sin padre y Yo te he creado como una señal para los mundos, entonces adórame sólo a Mí. Y sólo debes depender de Mí.” Habla de una entrega total. Recuerden que Allah (swt) le está hablando a Su Profeta. “Toma este evangelio y con todo el ser ve a enseñárselo a los siriac. Y diles que lo que tienes en tus manos viene de Mí, que Yo Soy la Verdad, El que Vive Eternamente y que nunca desaparece”. Ahí comienza la otra parte, dirigiéndose al Profeta Jesús (as): “Debes creer en el Profeta analfabeto, en el Profeta Ahmad, el dueño del camello y el dueño del turbante, que viste ropa de lana, usa sandalias y tiene un bastón. Ojos anchos, cejas unidas y suaves. Sus mejillas son suaves, su cabello es enrulado, tiene una barba completa, una nariz árabe. Su cuello es como una jarra de plata. Sus clavículas parecen como si el oro corriera a través de ellas. Tiene vello desde su pecho. Sus manos son gruesas y lo mismo sus pies. Cuando se da vuelta para hablar con alguien no lo hace sólo con la cabeza, sino que lo hace con todo su cuerpo y mira a esa persona. Camina con determinación, como si estuviera descendiendo de una colina, a pesar de que camina en un terreno llano. El sudor en su rostro es como perlas, y cuando transpira, el olor del almizcle emana de él. Nunca existió un ser como él antes, ni existirá cuando él se vaya, se casará con muchas mujeres, pero tendrá pocos descendientes, y éstos serán de una mujer bendita, (Jadiyah (ra)), y esa mujer tendrá en el Paraíso una casa hecha de perlas, y en la cual no habrá nunca ni fatiga ni necesidades. Tú vas a apoyarlo ¡Oh ‘Isa! al Final de los Tiempos, de la misma manera que Zakariya lo hizo con tu madre. Y los dos que descenderán de Jadiyah (ra), (se refiere a Hz. Husseyn (ra) y Hz. Hassan (ra)) serán mártires. Él (refiriéndose a Hz. Muhammad (saws)) tendrá una residencia en el Paraíso que es indescriptible y como ningún otro ser humano. Lo que habla es el Corán y su religión es Islam. Tuba estará, para aquellos que vivan en su época, aquellos que son testigos de lo que él dice y obedecen lo que él dice”. Entonces ‘Isa (as) pregunta: “¡Oh, Mi Señor! ¿Qué es Tuba?” Y Allah (swt) le responde: “Tuba es un árbol que he plantado con mis manos y es el árbol que crecerá en todo el Paraíso. Sus raíces son de Ridwan y el agua de la cual se alimenta viene del Tasnim, extremadamente pura y fresca. Y aquel que pueda tomar un sorbo de esa agua jamás tendrá sed.” Hz. ‘Isa (as) pide que le permita tomar de esa agua. La respuesta es: “No, nadie puede beber de esa agua hasta que Hz. Muhammad (saws) no lo haga, luego todos los demás Profetas podrán beber. Lo mismo ocurrirá con las naciones. Primero la nación de Ahmad beberá de esa agua, y luego las demás naciones”.   

Esta es una muy pequeña, muy breve descripción de quién es el que nos lidera, de quién es él, por el cual este mes es celebrado.

Esta noche hagan muchos salawats, todo lo que puedan, todo los que les sean permitidos. Si se levantan para el Tahayyud recuerden pedir por él, porque este es su mes. Y este es el mes en el cual se recomienda recitar la mayor cantidad de salawats. Él lo dijo: “Este es mi mes y Ramadán es el mes de ustedes.”

Ahora bien, ¿por qué mencioné que la Torah fue recibido la sexta noche de Ramadán, Los Salmos de David (as) la noche doce, Los Evangelios en la noche dieciocho de Ramadán? Porque esas son cosas que esas son cosas que han descendido para nosotros y porque en este camino espiritual ocurren cosas que son visibles y ocurren cosas que no lo son, cosas que son alimentadas por la fe y otras que podemos elegir ignorar, pero que van a dirigir nuestra vida y nuestro destino, porque nosotros hicimos esa promesa frente a Allah (swt), la Shahada, y somos de la Nación de Islam, de la Nación de Hz. Muhammad (saws).  Nunca lo olviden, jamás lo olviden, por favor.

Es mi deseo y ruego que esta bendita y sagrada noche sea una noche de revelación, una noche de perdón para todos nosotros y para todos los musulmanes que han existido, que existen y existirán hasta el Final de los Tiempos. Pidan por todos ellos, pidan por ustedes, pidan por los amados, por la gente que ustedes quieren, la gente que los ha precedido, la gente de la que cada uno de ustedes descienden, aunque no hayan sido musulmanes. Ellos les han permitido, a través de los siglos, llegar a estar allí, en ese momento, en el cuerpo que tienen, y es por ello que deben compartir las bendiciones que tenemos todos en este momento. Por favor, recuerden eso.

 

As Salam ‘alaykum wa rahmatullah wa barakatuh.

 

Sohbet de Hajji Orhan Baba. “Bendito mes de Sha’ban. La bendita Noche de la Absolución.” Jueves 12-06-2014